Tengo un trabajo que tradicionalmente ha sido de hombres (como la mayoría antiguamente), aunque quizá éste por sus características un poco más especialmente… el caso es que a pesar de que las mujeres somos ya muchas, los hombres siguen siendo la mayoría, por lo que me he visto muchas veces hablando con mis compañeros en petit comité del «comportamiento» en general de las mujeres. La verdad es que en un principio, como orgullosa de ser mujer, se tiende a sacar la bandera del feminismo y defendernos a muerte, pero en realidad, si lo piensas, muchas de las cosas de las que nos «acusan» son verdades como templos, aunque nos j*** reconocerlo.. y eso es lo que quiero en este post, hacer un ejercicio de AUTOCONOCIMIENTO y reconocer todas esas cosas que pueden ser incomprensibles e incluso crispantes para la mayoría de los hombres que las «sufren» (y por las que nos quieren también porque nos hacen encantadoras ¡qué leche!).
Antes de todo advertir, que en todo momento, por supuesto, estoy hablando desde la generalidad y sin ánimo de herir sensibilidades… tomadlo en clave de humor.
1- Lo que esta claro que va en primer lugar es el controvertido síndrome premenstrual y sus consecuencias en nuestro carácter. Hemos dicho que vamos a contar verdades, así que ¡SÍ, SÍ NOS AFECTA! venga, decidlo en alto, veréis qué bien sienta. Vamos a ver, mensualmente nuestro cuerpo hace un cóctel hormonal y un día te levantas radiante y de repente el cable hace masa y zas! explota la bomba y con quién? pues con tu novio/marido/pareja que es el que tienes más cerca, y claro, te dijo que llamaría a las 12 y son las 12:02 y no te ha llamado… eso es que no le importas, y en ese punto, pasas al llanto, porque ya no es lo mismo y no me demuestra que me quiere… (bua- bua).. y entonces a las 12:04 te llama y claro, te ha hecho sufrir tanto que le tienes que montar un bronca descomunal y él al otro lado del teléfono, flipando… En fin, esto es un ejemplo, la bronca también puede surgir de temas como: no ha comprado el pan, no se ha bajado las bolsas de basura, y etc, etc… «Advertencia a novio/marido/pareja: lo reconocemos, pero como nos lo eches en cara, prepárate a soportar la furia de los dioses».
2- ¿Por qué decimos no cuando queremos decir si? y esto se hace extensible a cuando tenemos un enfado monumental, nos preguntan qué nos pasa y decimos: NADA. La mayoría de los hombres saben que ese NADA esconde algo siniestro y terrorífico que en cualquier momento puede explotarles en la cara irremediablemente… Aunque en este caso tengo que decir que para mí tiene una explicación superracional (o eso creo) y es que yo pienso: «DEBERÍAS QUE SABER QUÉ ME PASA, TU ERES EL CULPABLE», pero reconozcámoslo, la mayoría de la veces no tienen la más remota idea de qué han hecho entonces ese enfado no resulta nada útil como castigo. Siempre cuento como ejemplo, la historia de un sábado que Quique comenzó con una otitis y decidimos llevarle a urgencias para que no fuera a más, había carrera de MotoGP en la televisión y yo (sin petición previa) le dije a mi marido que se quedara viéndolo y yo me llevaba al niño porque no era nada grave, a lo que el accedió gustoso.. y ahí empezó mi cabreo porque cómo es posible que no quisiera venir con su hijo a urgencias???? y yo sola con él esperando toda la cola de urgencias… y mi cabreo iba en aumento… en fin, que cuando regresé a casa iba decidida a discutir, pero claro su primer argumento fue: «PERO SI ME LO HAS DICHO TU» y me pillo en uno de esos días conciliadores y tuve que claudicar un poco.. jejeje. «Tampoco hace falta dar la razón por completo, eh? con reconocer nuestro error parcialmente es suficiente, no se vayan a acostumbrar».
3- Otra verdad, y es la que más me revienta, es la rivalidad entre las mujeres, sobre todo en ámbitos como los laborales. Y tenéis que reconocer que es cierto que siempre acaba existiendo un pique absurdo que quizá nos viene como herencia genética porque es inevitable… Por ejemplo, cuando yo me quedé embarazada de Nacho, mis compañeros me cuidaron un montón y la verdad es que tuve mucha suerte porque sé que muchas mujeres sufren mucho en sus trabajos en esos momentos y en muchas ocasiones es un jefa (mujer) o incluso otras compañeras las que le hacen la vida imposible, lo que es incomprensible ya que precisamente son ellas las que deberían empatizar más con la situación, no?. Pero en fin, que lo estamos reconociendo porque es el primer paso para cambiarlo, no?? así que positividad!
4- Y por último, tenemos este defecto/virtud para tener en mil pensamientos a la vez en la cabeza, que en la parte buena es una maravilla porque somos capaces de hacer la lista de la compra mentalmente mientras preparamos la comida de mañana, pero la parte mala aflora cuando empezamos a relacionar… sí, sí, a relacionar los niños, el trabajo, las amigas, la casa, el gato, la suegra,… y todo en una maraña brutal que nos vuelve locas, y que muchas veces nos impide (o por lo menos, lo dificulta) desconectar e irnos a tomar un cafetito con una amiga sin pensar en el cerro de plancha de dejaste en casa. Este vídeo que os dejo aquí os va hacer a la idea de qué os cuento… tiene ya bastante tiempo, pero siempre que lo vuelvo a ver me hace reír y mucho!
La verdad es que este post ha sido como una terapia, porque sienta muy bien reconocer ciertas cosas en voz alta… pero recordad, hombres-lectores: DE LO TUYO HABLARÁS PERO NO OIRÁS.. ahí lo dejo!
Grandes verdades! Muy bueno!
como me decias esta mañana hay que reirse hasta de nuestra sombra 😜😘
Es buenisimo!! Eres total!
Grazie mile! 😘